Muchas veces, los profesionales del mundo de las tecnologías de información ven el cambio como una oportunidad para crecer. Asumir nuevos desafíos laborales enriquece a las personas, pero también puede mejorar sus condiciones económicas. Es una realidad que asumimos y entendemos como normal cuando vemos el mundo desde el prisma del profesional que presta sus servicios en una empresa. De hecho, muchos nos hemos cambiado de trabajo por estos motivos.

Sin embargo, esta realidad es mucho más difícil de aceptar cuando aplica para otro. Cuando el que quiere crecer laboralmente es un profesional que trabaja para nuestra compañía, ya sea directamente o a través de un outsourcing.

Es normal que sea difícil de asumir. No solo hemos depositado nuestra confianza en el Desarrollador de Software, Jefe de Proyecto, DBA, Product Owner o Diseñador UX/UI, sino que además esta persona ha adquirido un conocimiento del negocio que es de alto valor y que es muy difícil de transferir a un reemplazante en corto tiempo. Y eso se vuelve especialmente complejo cuando la partida ocurre en medio de un proyecto.

En un mercado laboral excesivamente dinámico como el actual, la pregunta que le quita el sueño a las áreas de desarrollo y sistemas de las compañías es: ¿Qué pasa si un profesional de tecnologías de información se va?

Aunque los proveedores de servicios de staffing no están ajenos a la posibilidad de que un colaborador abandone sus funciones, lo cierto es que este tipo de prestadores están mejor preparados para responder en tiempo y forma que lo que lograría un área de recursos humanos de una empresa.

Hay al menos dos factores que influyen en esta ventaja:

  • Por tratarse del core del negocio, las empresas de staffing manejan una base de datos viva de profesionales que están en la búsqueda de empleo. Normalmente, lo realizan a través de procesos de reclutamiento y selección constantes para diferentes perfiles TI. Esto les permite tener a mano para reemplazar los profesionales con mayor celeridad.
  • Las empresas de outsourcing de profesionales TI tienen amplia experiencia en tecnologías de información, desarrollo de software, liderazgo de proyectos y creación de interfaces. Por ende, en el caso de tener que salir a buscar profesionales que no están en su base de datos les resulta más expedito que a una compañía que recibe un requerimiento de este tipo solo de vez en cuando. Esto es particularmente evidente cuando se trata de evaluar competencias.

La experiencia en TI de la empresa de outsourcing servirá, además, para permitir una rápida integración del profesional de reemplazo al proyecto. Un buen servicio de staffing debería considerar una etapa de inducción al profesional de reemplazo en donde el proveedor lo ponga al corriente de la empresa donde desempeñará sus funciones, las características del proyecto, su estado de avance, metodología utilizada, entre otros.

Pero esta posibilidad de reemplazo no solo debiera estar operativa cuando un profesional quiere dejar su trabajo, sino también cuando el cliente determina que un perfil debe ser cambiado ante situaciones problemáticas o ante la imposibilidad de adaptación a la cultura organizacional.

En efecto, en este tipo de casos el cliente debiera contar con una garantía de recambio que le permita traer un reemplazo para el profesional ante un conflicto grave, bajo desempeño laboral o cualquier problema que se suscite con su jefatura, colegas y subalternos.

Ahora bien, ¿cómo se puede evitar que un profesional de staffing se vaya de la organización?

Es un tema muy amplio para abordar y merece un artículo aparte. Sin embargo, en GlobalConexus estamos seguros que hay un par de claves que favorecen la estabilidad de los profesionales:

  • Entregar condiciones iguales o superiores que las que el cliente ofrece a sus colaboradores. En ese sentido, será de mucha importancia que el profesional tenga el mismo tipo de jornada y modalidad para desempeñar sus funciones, un sueldo igual o superior al de sus colegas que trabajan en la compañía donde presta servicios, seguro de salud complementario, jornada igual al resto de los colaboradores, salario acorde al mercado y a sus responsabilidades
  • Dar a los profesionales un “salario emocional”. Es decir, beneficios no económicos que mejoran la calidad de vida del colaborador. Jornada reducida los viernes, opción de teletrabajo permanente, días administrativos, permisos especiales para su cumpleaños, entre otros, son algunos ejemplos.

STAFFIT es el servicio de outsourcing TI de GlobalConexus, si necesitas asesoría o información sobre nuestros servicios, puedes contactarnos directamente aquí.

 

Foto por Scott Graham en Unsplash